Este jueves hemos exigido la apertura de una mesa de negociación por parte de la Caja Rural. Así desde la Plataforma Stop Desahucios Granada 15M nos hemos concentrado frente a la sucursal que Caja Rural tiene en el barrio del Realejo para exigir esta medida que permita abordar casos que desde las propias sucursales se están negando a resolver.
Mesa de negociación, una primera medida
Sería esta una primera medida que permitiría abrir una ventana de esperanza para gran número de familias en las que los directores de las sucursales, donde tienen sus hipotecas, están negándose a dar soluciones ya sea porque directamente no quieren o porque no está en sus manos dar la solución.
La Caja Rural de Granada se ha negado hasta ahora a tener una mesa de negociación abierta: es la única gran entidad financiera que no tiene abierto ningún canal directo de diálogo entre Stop Desahucios Granada 15M y los niveles superiores de la entidad.
Caja Rural marcada por las malas prácticas
Los activistas de la plataforma, con apoyo de los vecinos, hemos denunciado las prácticas de esta entidad marcadas por la inclusión de clausulas abusivas en las hipotecas (como las famosas clausulas suelo), por la falta de información a sus clientes en los momentos de dificultades así como por ofrecer soluciones que han supuesto más que una ayuda una losa en la situación de muchos de sus clientes. Clientes que se han visto desahucios o han sufrido enormes penalidades que a veces han terminado de la manera más dramática posible (incluso en suicidio).
Mientras se desarrollaba la acción se ha presentado un escrito con las demandas de la plataforma. Escrito que el director de la sucursal se ha comprometido a elevarlo a los servicios centrales de Caja Rural para que sea estudiado y cuya respuesta quedamos a la espera.
Las administraciones también son responsables
Esas reivindicaciones también serán presentadas, en diferentes localidades, a los ayuntamientos que se van a constituir el día 15 de junio: desde las administraciones es fundamental que no miren para otro lado ante situaciones de este tipo. Sobre todo con una entidad que presta servicio en todos los municipios de nuestra provincia y que lo hace de una manera prepotente y sin diálogo.
Así, si no hubiera soluciones, está previsto, para el futuro, nuevas actuaciones para concienciar a las autoridades públicas sobre la necesidad de no dejar a sus vecinos a los pies de los caballos en relación a las prácticas y la falta de soluciones de la Caja Rural. Estas autoridades tienen que oír la dramática situación de decenas de familias de sus municipios que se encuentran desesperadas.
Porque la lucha es el único camino. Sí se puede.