Conseguida una nueva reestructuración de la deuda para cinco años
Adriana y Álvaro han conseguido firmar una reestructuración de la deuda, acogiéndose al Código de Buenas Prácticas, con el Banco Santander. A resultas de este acuerdo, podrán seguir viviendo en su casa durante los próximos cinco años sin pagar ni un euro.
El caso de Adriana y Álvaro es el caso de miles de familias de clase trabajadora que como consecuencia de la crisis económica que comenzó en 2008 vieron sus expectativas vitales seriamente dañadas. Adriana trabajaba como empleada del hogar, y Álvaro trabajaba en cualquier cosa que le fuera saliendo, en un momento en el que no faltaba el trabajo en el sector de la construcción.
En junio de 2006 firmaron una hipoteca con el antiguo Banco Andalucía. En ese momento trabajaban los dos a tiempo completo y tenían una situación económica desahogada. Sin embargo con el comienzo de la crisis todo cambió y la situación fue deteriorándose. “En el año 2013 empezamos a tener dificultades, ya no podíamos afrontar el pago de la hipoteca porque el trabajo empezaba a escasear” nos comenta Álvaro. Esto hizo que tuvieran que buscar una solución y tuvieron que sentarse a negociar con el Banco Popular que en ese momento era el dueño de su hipoteca tras quedarse con los fondos del Banco Andalucía.
En ese momento el Popular les hizo una propuesta para cinco años pero sin informarles en ningún momento de las posibilidades que el Código de Buenas Prácticas les daba. Fue una solución en la que firmaron a ciegas y en la que el elemento que predominó fue la falta de transparencia.
Al finalizar el plazo de cinco años, y puesto que la situación seguía siendo complicada, «volvimos a sentarnos con el banco para decir que estabamos en la misma situación” nos comenta Adriana. “Pero en ese momento el banco se negó en redondo diciendo que no podían porque ya les habían dado una primera reestructuración” nos apunta Álvaro. Nunca en todo este tiempo les habían hablado del Código de Buenas Prácticas al que estaba acogido el banco, ni las posibilidades que dicho Real Decreto de Deudores Hipotecarios les ofrecía.
Fue entonces cuando, hablando con una amiga que trabaja en Bankia, conocieron la plataforma de Stop Desahucios Granada 15M y empezaron a venir a la asamblea que el grupo tiene en el Zaidín.
Ahí conocieron los engaños que les habían realizado cuando no les ofrecieron el poder acogerse al Código de Buenas Prácticas y a conocer las posibilidades que había a nivel legal. Se inició así un proceso para empezar a pelear, apoyados por los compañeros de la Plataforma para conseguir una reestructuración tal y como marca el Real Decreto. En ese momento es cuando empieza a quedar atrás el miedo y las preocupaciones de perder su casa y se abre una ventana para la esperanza.
Desde julio de 2019 estuvieron reuniendo documentación para presentarla en el banco y apoyados y asesorados por el grupo, tras muchas idas y venidas al banco, y sin perder nunca la esperanza, en septiembre les comunicaron que podían “acogerse” al código de buenas prácticas y que le habían concedido una nueva reestructuración.
El lunes 3 de febrero, acompañados por participantes en Stop Desahucios Granada 15M, finalmente firmaron el acuerdo de reestructuración. Por fin iban a poder respirar tranquilos. Ahora iban a poder encarar el futuro con más tranquilidad y seguridad para todo lo que este pudiera depararles.
Respecto a la plataforma, Adriana nos comenta que nos han acogido muy bien, nos han asesorado estupendamente porque veníamos con una venda, sin saber lo que habían hecho con nosotros. En ningún momento nos han dejado solos y siempre hemos ido acompañados de la mano por compañeros que han estado ahí para todo lo que ha ido haciendo falta.
Por su parte Álvaro nos señala sin dudar ni por un instante que a otra gente que esté en esa situación le decimos que no tienen que tener miedo y que no tienen que sentirse solos. Estando organizados sí se puede, se puede pelear y conseguir soluciones y salir del pozo en el que a veces nos quieren meter.
Y desde la tranquilidad que la nueva situación les depara para afrontar el futuro, Adriana y Álvaro nos comentan que ahora seguimos apoyando a otros compañeros, participando en la asamblea y en las acciones de protesta que tienen lugar todos los jueves. Ayudamos en lo que podemos y nos parece importante que la gente siga participando y apoyando. Ahora estamos en mejores condiciones para apoyar y seguir ayudando a quien lo pueda necesitar.