María José Navarra ha conseguido entregar su vivienda hipotecada en La Zubia a cambio de la condonación de su deuda con Unicaja, mediante un acuerdo extrajudicial por el que también queda libre su madre, avalista. Navarra, que actualmente vive de alquiler con sus hijos de 13 y 6 años, es una auxiliar de clínica en paro que se hipotecó junto a su entonces pareja en 2005.
Esta vecina de La Zubia abandonó la vivienda en 2012, cuando se separó. Antes la familia ya llevaba medio año sin pagar las cuotas dada su precariedad económica.
«Hemos tenido que luchar muchísimo. El director de la sucursal se ha portado fatal, me decía que era una pesada por ir tanto al banco», relata Navarra. En febrero de 2013 se incorporó a Stop Desahucios 15M Granada, en su asamblea en La Zubia. «Los compañeros y compañeras me acompañaron pero el banco no cedía y amenazaba, tuvimos que hacer una acción porque no te escuchan, hasta que al final tuvieron que poner un mediador para solucionar el conflicto», indica.
Para Navarra, en Stop Desahucios ha conocido a «las mejores personas que me he podido encontrar en mi vida. A todo el mundo le recomiendo participar: gracias al grupo he podido salir del hoyo». Esta vecina sigue participando a día de hoy. «Hay mucha gente que necesita ayuda», concluye.