Francisco Miguel Gutiérrez y Matilde García pagarán 32 euros al mes en concepto de carencia durante los próximos cinco años, al reestructurar su hipoteca con el Banco Santander. Este acuerdo, conseguido gracias a la participación de la familia en Stop Desahucios 15M Granada, supone para ellos una forma de tomar aire y mantener su hogar.
Gutiérrez, trabajador de la construcción en paro de 35 años, y García, ama de casa de 37, viven en el Zaidín con sus tres hijos de 18, 15 y 7 años. Se hipotecaron en 2007. «En 2010, con la crisis de la construcción, me quedé sin trabajo y después sin ayudas. Hemos estado pagando con el dinero recibido por un accidente laboral que padecí», cuenta Gutiérrez.
La cosa no parecía tener mucho futuro hasta junio de 2014, cuando la familia empezó a participar en la asamblea de Stop Desahucios de su barrio. Pocos meses después se llegó a un acuerdo que antes el banco no ofrecía, según aclara este afectado: «Con lo que yo he visto con compañeros que tienen muchos problemas, en nuestro caso ha ido muy bien».
Para Gutiérrez, en Stop Desahucios «somos una piña, vamos todos a una. Sin Stop Desahucios no se hubiera conseguido nada, me siento orgulloso». En consecuencia, afirma que irá «a todas las asambleas y acciones que pueda. Hasta que cambiemos las cosas seguirá viniendo gente y tenemos que seguir».