«Tengo muy claro que la unión hace la fuerza», dice Amalia Fernández, cuya familia acaba de conseguir, gracias a su participación en el grupo Stop Desahucios 15M Granada, la reestructuración de su hipoteca y una carencia por la que, en lugar de adentrarse en un proceso de desahucio, pagarán alrededor de cien euros al mes al Banco Mare Nostrum (ex Caja Granada), en vez de los 900 que pagaban hasta ahora.
Fernández, auxiliar sociosanitaria en paro de 39 años, vive en Fuente Vaqueros con su pareja, Marco Antonio Ortega, albañil de 40 con un contrato temporal, y sus tres niños: Marcos, de 13 años, Pablo, de nueve, y Aroa, de 7. Compraron su casa en 2005.
Poco tiempo después «vino la crisis, y cada vez teníamos menos trabajo», recuerda Fernández. En 2008 firmaron una ampliación de la hipoteca. «Nuestro error fue confiar en el banco», indica esta vecina: después de un período sin pagar nada, las cuotas mensuales alcanzaron un nivel astronómico: 900 euros. «El sueldo entero era para pagar al banco», recuerda.
«En la primavera de 2014, por otra familia afectada, nos enteramos de que estaba Stop Desahucios y empezamos a ver otras opciones», explica Fernández. La familia empezó a participar en la asamblea del Zaidín, y aproximadamente medio año después llegó el acuerdo con BMN. «Todos estos meses han sido de lucha hasta conseguirlo. Stop Desahucios es maravilloso, ha sido nuestra salvación, nuestro salvavidas, sobre todo teniendo críos. Antes estábamos perdidos. Hay que apoyarse», concluye.