El pasado jueves 17 de noviembre el Grupo Stop Desahucios Granada 15M llevó a cabo una nueva acción en las puertas del Banco Santander, situado en la Gran Vía de Colón, en Granada.
El objetivo de la acción era poder alcanzar un acuerdo para que José Francisco y su familia pudieran mantener la vivienda, haciendo frente al pago de la hipoteca a través de una cuota asumible, conforme a los ingresos económicos familiares.
Hasta el momento Banco Santander se ha negado a dar una solución viable y todas las propuestas planteadas has sido rechazadas.
Resulta intolerable que entidades como el Banco Santander que incluso ha conseguido aumentar sus beneficios en un 40% más en este año, no ofrezca soluciones a las familias que por cuestiones ajenas a su voluntad se ven imposibilitadas para hacer frente al pago de la hipoteca.
Una situación vulnerable del derecho a la vivienda
Ante todo ello, en el actual contexto, es fundamental y cada vez más urgente que se legisle para garantizar el derecho a la vivienda frente a los beneficios de la banca y los grandes fondos inmobiliarios y sus actuaciones especulativas.
Cada vez es más necesario que las miles de viviendas rescatadas con dinero público sean puestas a disposición de la sociedad para garantizar el derecho a la vivienda de las familias que no pueden acceder a una vivienda a los precios del mercado.
En estos momentos es más evidente que nunca que se necesitan medidas urgentes para los casos de familias que, ante la escalada del Euribor, no van a poder seguir pagando las cuotas de su hipoteca y ante el encarecimiento de los precios de los alquileres tampoco podrán acceder al mercado del alquiler.
La realidad para muchas familias, la inmensa mayoría de clase trabajadora, es que quedan excluidas de cualquier posibilidad de acceso a la vivienda a través de los mecanismos del mercado: a través de la firma de hipotecas que cada vez son más imposibles de pagar o a través de contratos de alquiler desorbitados que poca o ninguna relación tienen con los salarios que cobramos.
Al terminar la acción mantenida en las puertas del Banco Santander
Al finalizar y tras haber entregado de nuevo una propuesta y haber conseguido hablar con la responsable, se confirmó una cita para tratar el asunto de José Francisco y su familia. Con esto se abre un abanico de posibilidades gracias a la presión mantenida en la calle, en las puertas del Banco Santander.
Por todas estas razones, es evidente que existen motivos de sobra para que no nos resignemos, para que no nos conformemos. Para salir a exigir y reivindicar frente a la banca, frente a los fondos de inversión, frente a las administraciones del signo que sea, tanto a nivel local, autonómico como estatal. Para que ninguna familia que dé el paso de organizarse, junto a otras familias, tenga que enfrentarse a las situaciones de desahucios en solitario.
