Desde principios de 2014, más allá de problemas o rifirrafes que se pueden dar en cualquier grupo humano, aumentaron gravemente los conflictos internos en el grupo Stop Desahucios 15M Granada, que agrupa a una decena de asambleas de la provincia.
Lo que disparó los problemas fue la actitud de un grupo de entonces compañeros con peso en el grupo: principalmente Antonio Redondo («zipi»), Santiago Martín, José Manuel García Morales y Paco Domínguez (quien en un principio mantenía una actitud presuntamente conciliadora pero posteriormente se iría posicionando claramente con los demás).
Estas personas propusieron a la asamblea general del grupo (máximo órgano de decisión) un cambio en el funcionamiento por el que un grupo de abogados con los que tenían contacto pasarían a cobrar a las personas afectadas al menos en algunos casos, y después parte de ese dinero volvería a Stop Desahucios.
Estas personas propusieron a la asamblea general del grupo (máximo órgano de decisión) un cambio en el funcionamiento por el que un grupo de abogados con los que tenían contacto pasarían a cobrar a las personas afectadas al menos en algunos casos, y después parte de ese dinero volvería a Stop Desahucios.
La propuesta no fue aprobada a pesar de que sus patrocinadores se esforzaron en llevar a la asamblea general del grupo a decenas de personas de las asambleas que ellos controlaban (principalmente Maracena, Chana y Alfacar, a través de su papel como negociadores con bancos). A pesar de ello, el tema se seguiría tratando en las siguientes asambleas generales, con actitudes autoritarias y malos modos hacia quienes no sintonizaban con ella, incluyendo una amenaza de violencia física en una ocasión, llegando a producir la salida del grupo de algún compañero dado su cansancio en enfrentamientos internos.
Esas tres o cuatro asambleas generales que se celebraron dejaron el órgano completamente inservible, dado que este grupo y sus seguidores impedían cualquier toma de acuerdo que les perjudicase. Incluso una de sus asambleas afirmó que pensaba llevar a cabo el acuerdo con los abogados al margen de lo que pensara el grupo. En ese momento, la coordinadora (reunión semanal de representantes de asambleas) asumió las funciones de la asamblea general. Varios compañeros se dirigieron a la comisión de mediación de la PAH, que no hizo nada por su saturación.
Al mismo tiempo, mucha gente del grupo empezó a cuestionar el papel de Antonio Redondo en el mismo. Redondo hasta entonces había suscitado mucho respeto, dada su implicación, tomándose el activismo en Stop Desahucios casi como una jornada laboral, lo cual se podía permitir dado que varios compañeros le apoyaban económicamente (de lo que después se arrepentirían).
Gracias a ello, Redondo fue asumiendo más y más funciones, algunas en exclusiva, sin que nadie le eligiera para ello: gestor del teléfono del grupo (que al principio iba rotando, hasta que llegó a él), miembro del grupo de acción, miembro de varias mesas de negociación, atención a la prensa, presente en varias asambleas y gestor de muchos casos de afectados, acceso al e-mail, acceso a la web, a los perfiles de facebook, al twitter…
Con el apoyo de García Morales, uno de los dos redactores de la página web, se fue inventando el cargo de «portavoz», el cual no existe de manera permanente sino que es una función que siempre se ha considerado rotatoria. En casi cualquier noticia que escribía, Morales incluía declaraciones de Redondo como «portavoz».
A esto se sumó que Redondo empezó a participar en el partido Ganemos Granada, haciendo también en sus primeros tiempos de portavoz ante la prensa.
Con el apoyo de García Morales, uno de los dos redactores de la página web, se fue inventando el cargo de «portavoz», el cual no existe de manera permanente sino que es una función que siempre se ha considerado rotatoria. En casi cualquier noticia que escribía, Morales incluía declaraciones de Redondo como «portavoz».
A esto se sumó que Redondo empezó a participar en el partido Ganemos Granada, haciendo también en sus primeros tiempos de portavoz ante la prensa.
Como decíamos, la coordinadora había ido asumiendo funciones dada la degradación de las asambleas generales. Ésta recordó normas básicas del funcionamiento del grupo desde sus inicios: no existe el cargo de portavoz permanente y esta tarea debía rotar, incluyendo el teléfono del grupo, así como que, como indican las normas de la PAH, los miembros de partidos o candidaturas no nos pueden representar públicamente.
Las personas mencionadas habían optado por sabotear la coordinadora, en esta ocasión haciendo que sus asambleas no asistieran para luego señalar la falta de representatividad de las decisiones allí tomadas y que «siempre se hablaba de lo mismo» (de quién debía gestionar el teléfono, lo que se hablaba porque Redondo lo monopolizaba).
Cuando la coordinadora acordó (o recordó) las normas mencionadas, Redondo y compañía hicieron que varios de sus seguidores escribieran e-mails en su apoyo, con lemas del estilo de «Zipi es mi portavoz».
El jueves 25 de septiembre asistieron a la coordinadora, acompañados por una veintena de seguidores para apabullar físicamente a los presentes, y por boca de García Morales afirmaron que no reconocían a ningún órgano de decisión del grupo, que Redondo seguiría siendo su portavoz y que iban a convocar una asamblea general para que participaran sus tres asambleas, así como acusaciones personales hacia un miembro del grupo para desviar la atención hacia enfrentamientos de personalidades, que lógicamente no es el asunto que nos ocupa.
El principal problema no es que hubiera una escisión, sino que la acumulación de poder por parte de Redondo hacía previsible que Stop Desahucios perdiera gran parte de su infraestructura: el teléfono, el twitter, el perfil de facebook (StopDesahucios Granada)y el grupo de facebook (Stop Desahucios de la asamblea de Granada 15M) eran robados de facto porque Redondo era la única persona que disponía de las claves. Para evitar perder el resto (blog:granadastopdesahucios.wordpress.com, e-mail:stopdesahuciosgranada@gmail.com, y comunidad de facebook: Stop Desahucios Granada) el compañero de prensa intentó cambiar las claves para que Redondo no los robara también esa misma noche. Sin embargo, éste se anticipó y también quedó claro por qué tenía tanto interés en conservar el teléfono: sin consultar a nadie, había vinculado blog y e-mail al número de teléfono, para asegurarse de que ante cualquier decisión del grupo él seguiría manteniendo el acceso.
Así pues, Stop Desahucios perdió todos sus medios de comunicación y el contacto directo con la PAH y el Movimiento Andaluz por la Vivienda (vinculados al e-mail). El MAV, por cierto, también ha visto robada su página de facebook, por lo que sabemos.
En las siguientes semanas, Stop Desahucios se fue reorganizando, manteniendo sus asambleas, convocatorias y creando un documento de funcionamiento interno para intentar mejorar y no volver a repetir esta experiencia, que se aprobaría en una asamblea general en diciembre. Asímismo, creó una comisión de comunicación que recuperó la página de facebook PAH Granada Stop desahucios (iniciada en 2011, única que no gestionaba Redondo al estar a cargo de un compañero que se había mudado de ciudad) y creó una nueva web:afectadosporlahipotecagranada.com, twitter: @pahgranadastopd, e-mail:info@afectadosporlahipotecagranada.com, número de teléfono… Todos los demás datos de contacto que podéis observar en internet fueron robados o «inventados» por los golpistas para crear confusión.
En las siguientes semanas, Stop Desahucios se fue reorganizando, manteniendo sus asambleas, convocatorias y creando un documento de funcionamiento interno para intentar mejorar y no volver a repetir esta experiencia, que se aprobaría en una asamblea general en diciembre. Asímismo, creó una comisión de comunicación que recuperó la página de facebook PAH Granada Stop desahucios (iniciada en 2011, única que no gestionaba Redondo al estar a cargo de un compañero que se había mudado de ciudad) y creó una nueva web:afectadosporlahipotecagranada.com, twitter: @pahgranadastopd, e-mail:info@afectadosporlahipotecagranada.com, número de teléfono… Todos los demás datos de contacto que podéis observar en internet fueron robados o «inventados» por los golpistas para crear confusión.
No obstante, a nivel público sigue habiendo mucha confusión dado que Redondo y compañía no sólo mantienen los antiguos medios con nuestro nombre, colgando sus noticias y apropiándose en ocasiones de las nuestras, sino que invirtieron dinero en ganar miles de seguidores en un par de días en cuanto lanzamos nuestros nuevos medios. Así mismo, no hemos conseguido que la PAH modifique en su página nuestros datos de contacto.
Desde el principio, varios compañeros contactaron con diversas PAH y miembros de ellas para saber qué deberíamos hacer para regularizar nuestra situación. Incluso asistimos al último encuentro de la PAH en Madrid, donde no pudimos participar con todas las de la ley e incluso los golpistas estuvieron a punto de integrarse en una comisión, lo que se evitó al conocer el resto que existían problemas internos. A día de hoy, Stop Desahucios sigue funcionando, manteniendo un importante nivel de actividad, pero sigue estando desconectado del resto de la PAH.
[…] explica la plataforma en una nota de prensa, el conflicto se inició en 2014, después de que un grupo “de peso” en el movimiento […]