Dos familias afectadas han reclamado hoy una salida para su situación
Stop Desahucios Granada 15M se concentró este jueves 26 de julio a las puertas de la sucursal que Unicaja tiene situada en la calle Pavaneras, en el centro turístico de nuestra ciudad.
Con esta acción se pretendía encontrar soluciones para dos familias afectadas: Antonio, amenazado por un desahucio de su vivienda situada en Monachil e Iván y Lorena, padres de dos niños menores de edad, que perdieron su vivienda a manos de esta entidad y que les sigue reclamando más de 50.000 euros todavía.
Son dos casos similares a los de miles de familias de clase trabajadora que han padecido los efectos de la crisis económica y que cuando acudieron a su banco para buscar soluciones se encontraron la puerta cerrada.
Como hoy donde la entidad estaba cerrada a cal y canto, con los empleados ocultos como si tuvieran algo que ocultar mientras casi medio centenar de activistas de Stop Desahucios denunciaban a la puerta de la entidad la falta de soluciones para estas familias.
Como consecuencia de esta actitud de la entidad (que se ha negado a recibir a los representantes de Stop Desahucios), la sucursal de Unicaja se ha mantenido cerrada durante casi dos horas sin atender a los clientes que han podido acercarse por allí.
Unicaja reincidente
Esta actitud no es nueva; en el pasado (pincha aquí para leer sobre otras acciones en Unicaja) ya se ha repetido por parte de Unicaja que hasta ahora ha destacado por una práctica basada en su falta de transparencia y claridad en relación a miles de clientes a los que se les engañó a través de cláusulas abusivas y a los que en ningún momento se les ha informado de las posibilidades que la ley reconocía para encontrar soluciones viables para que las familias no perdieran sus viviendas.
Durante el desarrollo de la acción (que se ha prolongado durante casi 2 horas) se han coreado consignas a favor del derecho a la vivienda, contra la banca y Unicaja por su actitud carroñera y su falta de soluciones ante la atenta mirada de los centenares de personas que transitaban por las puertas de la sucursal. Es por ello que hoy, sin duda, la imagen de Unicaja sale dañada entre todos aquellos que han podido escuchar la situación de las familias afectadas y han podido comprobar como en lugar de sentarse a negociar con los que han sido sus clientes, ha decidido ignorarlos y cerrar la sucursal.
La acción que ha terminado sobre las 12,30 horas se ha cerrado señalando que mientras no haya una solución para estas familias afectadas, las acciones de protesta a las puertas de las diferentes sucursales que tiene esta entidad no se van a detener sino que irán a más.
[…] 2013 hemos presentado escritos, muchas vueltas al banco, muchas concentraciones y protestas a la puerta de Unicaja pero todo esto ha valido la pena” nos comenta y es que después de años […]