¡Hola compañeros!, soy Teresa, una mujer afectada por la hipoteca como todos vosotros y si os importa me gustaría contaros mi historia con Stop Desahucios Granada 15M.
Todo empezó en el año 2006, cuando decido hipotecar la casa de mi madre, en la cual vivo yo, ya que mis hijos decidieron montar restaurante, este funcionó bastante bien hasta 2009. En esta año las deudas nos comían y con sólo mi pensión no podíamos hacer frente a todo y decidimos cerrar para así intentar no perder la casa de mis padres y ahí fue cuando empezó mi sufrimiento.
Pasan unos años y llega Enero de 2012.
Era un día lluvioso, salí a la calle a comprar y cuando salí del supermercado ví a una chica llamada Cecilia y estaba repartiendo octavillas. Me acerqué a ella, le pedí una y ví que era de Stop Desahucios.
Mientras caminaba hacía casa, mi cabeza empezó a dar vueltas: ¿Por qué no ir a hablar con ellos, aunque soy un poco tímida? Y esta vez me dije a misma: ¡Tienes que ir!
Al día siguiente que era sábado, me acerqué al local de la Ribera y encontré a Cecilia y comencé a explicarle mi caso desde el principio.
Pero antes de nada decidí arreglar el problema de mi hijo sobre su alquiler con Vigsosa (Empresa de Vivienda de Diputación), muy conocida por todos vosotros.
Cuando asistí a mi primera asamblea vi que no era la única con problemas.
La asamblea duró dos horas, en las cuales hubo muchos casos, había una chica que lloraba desconsoladamente, pero todos le decían: ¡ánimo, que como tú estamos todos! Y la verdad, salí muy apenada de aquella primera asamblea.
Gracias al apoyo y persistencia del Grupo Stop Desahucios, el caso de mi hijo se solucionó en poco tiempo, con un resultado de contrato por un año prorrogable cada seis meses, pagando 100€.
Y aquí es donde comienza mi segunda etapa y la más dura. Era Febrero de 2014 y ya no podía hacer frente a la situación que estaba viviendo. Mi madre murió en 2010 y fueron 4 años fatídicos para mí. Pero empecé a luchar con ayuda siempre de Stop Desahucios, han sido 8 meses incansables: problemas con las escrituras, cambios de titularidades, plusvalías, registros, etc… un ir y venir de infinidad de documentos, una auténtica pesadilla para mí.
Pero tras la tempestad, llega la calma.
¡Lo conseguimos compañeros!
El martes 21 de Octubre de 2014 firmé ante notario una reestructuración de tres años prorrogable, en los que voy a pagar más o menos 100€.
¡Un gran paso!
Antes de terminar deciros que espero no haberos aburrido con mi historia y que sin vosotros no hubiera sido posible.
¡Gracias a todos! ¡Sí se puede!
Teresa.
Si tuviésemos un sistema socialista en nuestro país( España) ,que se encargara de hacer viviendas para el pueblo ,no habría problemas con los bancos_ desahucios, por ser estos públicos ,osea del pueblo, siendo este el que crea el dinero¿ quien es el que trasforma la materia prima si no son los que trabajan ?,todo el cobra un sueldo es un trabajador,sea en el banco,en la mina,construcción,sanidad,transporten,campo,limpiando,casas,ect. los propietarios de los bancos son los que amasan el dinero de todos,si estos estuvieran en manos del estado ,loa usureros no existirían,habría dinero para sanidad,educación,investigacion,para el bienestar de toda la población en general.