El pasado jueves, como cada jueves de la semana, el Grupo Stop Desahucios Granada 15M se concentró en las puertas de un banco.
En esta ocasión la concentración se desarrolló en las puertas de CaixaBank, entidad que tiene atrapada a cinco familias a las que no les ofrece soluciones y se niega a reunirse con ellas, rehuyendo de su responsabilidad. Escondiéndose tras la venta de las viviendas a fondos inmobiliarios y tras la separación de sus financieras como Credifimo.
La concentración se ha desarrollado en las puerta de la sucursal situada en Gran Vía. Delante de ella se han concetrado decenas de compañeros y familias de Stop Desahucios. Que han empezado los cánticos con: una solución para las familias afectadas.
Un grupo de compañeros, junto a las familias afectadas han entrado a la sucursal, para negociar y entregar nuevamente escritos.
En la puerta se ha leído el siguiente comunicado, para que los viandantes sepan cuáles son las prácticas de esta entidad
Hoy estamos en la puerta de La Caixa, entidad que lejos de dar soluciones a las familias afectadas, que están en riesgo de perder la vivienda y verse en la calle, lanza balones fuera, pasa la pelota al tejado de otros y se oculta tras pantallas que ella misma crea.
La Caixa ha vendido casi todo su parque de viviendas a fondos de inmobiliaras que son filiares de esta misma entidad. Mediante esta práctica pretende eludir su responsabilidad y quitarse de en medio a las familias como si de un engorro se tratara. Quieren que las familias dejen de reclamarle soluciones y de acudir a sus sucursales para poder encontrar una salida.
Estos fondos inmobiliarios, que operan muchos de ellos a través de las redes y tienen sede fuera de España, hacen imposible cualquier diálogo. Y por eso queremos denunciar que estos fondos inmobiliarios son apéndices, pantallas de la de la propia Caixa.
Hubiera sido mucho mejor para las familias que en lugar de que La Caixa se dedicara a especular con las viviendas, haciendo negocio con los fondos de inversión y con sus fondos pantalla, para quitarse los problemas, se hubiera sentado a negociar con esas mismas familias.
Por ello estamos aquí, en la puerta de La Caixa, que lava su imagen una y otra vez, con su obra social, mientras por la puerta de atrás desahucia a familias y se niega a ofrecer soluciones viables para estas familias que pasan por dificultades. La única respuesta que dan a las propuestas presentadas es que la familia abandone la vivienda. Y eso es intolerable.
Porque nosotros respondemos: ni casa sin gente, ni gente sin casa.
Hoy estamos aquí para que:
Con Pilar, para que le concedan la extinción de la deuda porque tras quedarse con su casa, y dejarla en la calle, no conforme con eso, todavía le sigue reclamando una ingente cantidad.
Con Ana Mari para que le concedan de una vez por todas un alquiler social en la vivienda y dejen de intentar desahuciarla vez tras vez. Estamos dispuestos a sentarnos estudiar soluciones. Pero La Caixa nos engaña y se niega ofrecer soluciones que permitan a la familia permanecer en la vivienda.
Para que a Ceferino le concedan la dación en pago de la vivienda de su hijo, del que él es cotitular y cuya vivienda, totalmente pagada, quieren también apropiarse.
Para que a Miguel le concedan una reestructuración de la deuda para que pueda mantenerse en la vivienda, e ir pagando de manera que se ajuste a sus posibilidades.Estas son familias por las que hoy estamos aquí concentrados y no podemos aceptar que la respuesta sea que ellos no tienen nada que ver porque las viviendas están vendidas a un fondo inmobiliario o los préstamos a unas financieras hijas de La Caixa.
Queremos que la Caixa ofrezca un espacio de diálogo real y dé soluciones reales y verdaderas a las familias. Ya hemos esperado mucho y las familias están desesperadas. Queremos soluciones. Y no pararemos hasta conseguirlas.
La lucha contra CaixaBank hasta conseguir soluciones viables para las familias afectadas continuará.
Sí se puede, pero no quieren
La lucha sigue