UN VECINO DE ALMUÑECAR CONSIGUE REESTRUTURAR LA DEUDA DE SU VIVIENDA GRACIAS A LA MEDIACION DE STOP DESAHUCIOS Francisco Fuentes se suma a la larga lista de los almuñequeros que, gracias a Stop Desahucios Granada 15M,  logran firmar un acuerdo con el banco evitando la pérdida de su casa por no poder hacer frente a

un nuevo alquiler social. Almuñecar

 Alquiler social, defendiendo el derecho a la vivienda Rosa Martin ha logrado un alquiler social con el Banco Popular gracias al apoyo de Stop Desahucios de Almuñecar y La Herradura, grupo del que forma parte. Rosa vive en la casa con sus dos hijas de 18 y 14 años, tiene 45 y lleva en paro

Hoy Lunes 25 de Abril,  la marcha a Almería, denunciando la práctica de Cajamar ha llegado a El Ejido. Durante el trayecto han estado acompañados y arropados por compañeros de la costa de Stop Desahucios Granada 15M, entre ellos compañeros de la asamblea de Salobreña y Almuñecar.   Hoy igual que el resto de los

Gracias a la mediación de Stop Desahucios Granada 15M, Juan y María vecinos de Almuñécar, acaban de firmar ante notario una dación en pago con extinción total de la deuda. Juan, de 58 años, era trabajador de la hostelería hasta hace 4 años que le dieron de baja por enfermedad. A partir de ahí empezaron

¿Por qué seguimos la campaña contra cajamar?

Isa, contrató su hipoteca con Cajamar, al quedarse en paro y comenzar con los problemas económicos acudió a su sucursal para solicitar la dación en pago, puesto que no puede mantener los pagos mensuales de subsistencia. Hace casi dos años que lleva luchando con Cajamar, y la única oferta que le hace Cajamar es hacer

Mohamed, Almudena, Rafael, Elisa y Juanmi son los nombres de las personas afectadas por las hipotecas que, junto con sus familias, han conseguido llegar a acuerdos con los bancos recientemente gracias al trabajo de Stop Desahucios en Almuñécar, a través de su asamblea local. Concretamente, se trata de dos reestructuraciones y tres daciones en pago.

La semana pasada acudió a la plataforma Elvira, una vecina de Almuñécar angustiada porque el día anterior se habían presentado en su casa los secretarios judiciales con la intención de desahuciarla, pero al comprobar que ni ella ni su familia habían recibido la notificación del lanzamiento, le dieron de plazo 10 días para que recogieran sus cosas. «Es